Arte, cultura y desarrollo local en Huachinera Sonora: el caso del Centro Artístico y Cultural de Huachinera (CACH) 2002-2010.

Abstract

Huachinera es un municipio enclavado en la Sierra Alta del estado Sonora, Su historia es similar a la de los pueblos y comunidades vecinas, responde su origen al proceso evangelizador en la parte noroeste del país. El desarrollo en general, no representa al de los grandes municipios del estado. A lo largo del tiempo, en la serrana altura, se comparten no solo la geografía montañosa y templada en su clima, sino, costumbres y fiestas, y hoy, la esperanza puesta en el arte y la cultura. Así las cosas, en los últimos años, en Huachinera ha sucedido algo que está marcando no sólo a su población sino a todo el territorio alto y serrano. Este suceso está representado por el Centro Artístico y Cultural de Huachinera, un proyecto que nace desde abajo, es decir, desde la organización de la sociedad civil y que converge en lo alto, en las decisiones políticas y de la administración pública, al menos desde ciertos programas de apoyo económico. Organizarse desde abajo, desde la sociedad, tiene procesos originales y atractivos, genera expectativas, al mismo paso que se enfrenta a problemas típicos de la asociación social, las responsabilidades crecen y los proyectos surgen esperanzadores. Desde esta visión es que surge un proyecto cultural, que a la par del arte ha generado expectativas importantes como: empleo, recreación, aprendizaje y mejores niveles de vida en la población. Después de ver el escenario transformado surgen cuestionamientos diversos y entre ellos quizá una pregunta puede ser clave para mostrar qué es lo que ahí sucede, es así como aparece la cuestión inicial de este trabajo: ¿genera desarrollo local el proyecto artístico y cultural como el que surgió en Huachinera? La respuesta no puede ser nítida, y menos aún concluyente, los elementos encontrados y observados bajo la mirada del estudio se vuelcan complejos, representando un dinamismo propio de los grupos organizados. Sobre todo porque la pregunta inicial está contenida en la expectativa del grupo que impulsa el proyecto. El desarrollo local supone la presencia de actores, en este caso, presentes en un proyecto cultural definido que pretende en forma tácita el desarrollo, lo cual parece ser rebasado en este momento. Aún así, bajo la pregunta señalada con anterioridad se pretende mostrar el desarrollo y su unión con la cultura; para ser precisos, el desarrollo local y la cultura en un proyecto que surge socialmente donde su actividad primordial está representada por el arte. Si bien, el recorrido en el proceso se dirige al ámbito del desarrollo local, hay elementos existentes que no son atendidos, no por demérito de su importancia, sino por las intenciones del propio trabajo en cuestión. Huachinera está embarcado en un recorrido donde los brazos alentadores se identifican en la propia idea del centro cultural, auspiciado en parte por la cooperación de algún programa social y por la participación institucional de su par transfronterizo cuya signatura aparece como HEART, desembocando en la construcción arquitectónica de un edificio cuyo gran mérito pretende albergar y depositar las manifestaciones del arte y la cultura. El sólo hecho de la edificación propicia en la comunidad una serie de actividades importantes como el empleo en la construcción, la generación de servicios como hospedaje que garantiza la estancia del visitante, la provisión de materiales indispensables para edificación, y los servicios básicos como la alimentación. El recorrido en esta investigación, se propone en los siguientes puntos: 1- Un planteamiento desde el desarrollo local y la cultura, donde se identifica un proyecto artístico y cultural surgido desde la sociedad civil. La participación social a través de este ente social, busca apoyos económicos para realizar quizá, el más grande proyecto de arquitectura cultural de la sierra alta, la construcción de un centro para la cultura y las artes. En el ir y venir constante con autoridades administrativas, se crea un club migrante en EEUU, mismo que ha de respaldar la parte proporcional del aporte económico que se realizó para la gestión de los recursos económicos; aquí se identifican la participación social de la organización, y las participaciones de las tres entidades gubernamentales, federal, estatal y municipal, a través de un programa social. 2- Una revisión del estado del arte del desarrollo local y la cultura, se muestran algunas experiencias donde se da la relación que se pretende estudiar en esta investigación. Posteriormente se analiza el proceso bajo el cual surge el centro cultural, su constitución como asociación civil. Se analizan las partes de un territorio como espacio donde se manifiesta la cultura y el desarrollo. 3- La identificación de las actividades que surgieron a raíz de la edificación del centro cultural, como negocios y servicios diversos, así como detalles de las actividades artísticas y culturales realizadas en el tiempo que abarca el estudio. El trabajo de investigación no resultó tarea fácil, la distancia representa un factor importante, pero no menos atractivo. La búsqueda de los datos que soportan la tesis, resultó una actividad exhaustiva, ya que el centro cultural no cuenta hasta el día de hoy con un archivo organizado. La actividad ordenadora corrió a cargo de Luis Espinosa que amablemente hurgó en los documentos dispersos que se tienen, y se pudo organizar la información, cabe recordar que parte de las actividades que se han realizado en Huachinera no están todavía registradas en archivo, y es probable que no lo estén a futuro, sin embargo la información recogida y ordenada permite adentrarnos en las prácticas realizadas en el centro y en la comunidad. Otro aspecto que debe considerarse, es la información oficial solicitada a la dependencia que apoyó el proyecto cultural, y que otorgó incompleta, para lo cual fue necesario examinar los archivos individuales de los actores esenciales del proyecto. Por otro lado es menester resaltar la gran apertura de quienes conforman el proyecto para la realización de este trabajo, poniendo a disposición todo lo que su alcance fue posible. En este sentido los integrantes del centro cultural se mostraron generosos y participativos en todas las etapas en las que este trabajo se llevó a cabo. Concluir la investigación no arroja resultados definitorios, pero sí avances en un proceso que se lleva a cabo de la mejor manera posible. El desarrollo local y la cultura suele ser una simbiosis extraña pero posible para el surgimiento de prácticas que mejoran la vida cotidiana. La tarea no es fácil, pero sí alentadora.